INTRODUCCIÓN
El Festival de Cine Italiano de Madrid llega a su décima edición, pudiendo presumir de haber alcanzado más de diez mil presencias y con una aceptación, y me atrevería a decir, con el afecto constante del público apasionado por el cine y por los amantes de Italia, en Madrid y en España, y con el aprecio de los profesionales del sector. Desde San Sebastián a Sevilla, crecen las relaciones, se multiplican las colaboraciones.
Las novedades introducidas en los últimos dos años, desde la creación del Premio Solinas Italia-España destinado a los jóvenes guionistas, al Foro de Coproducción y a los encuentros entre productores italianos y españoles, junto a la reciente apertura hacia América Latina, han hecho del FCIM algo nuevo y novedoso, algo que los festivales europeos e internacionales tienden a ser hoy en día: un lugar de encuentro y de investigación, de conocimiento y de intercambio, donde la creatividad y la empresa encuentran su elemento más preciado, nuevas oportunidades.
Una edición número 10 es, siempre, y lo sabemos, también una edición 01, un momento en la que se hace balance, se hace recuento, se observa con satisfacción un recorrido realizado. Una apuesta ambiciosa que se ha transformado en una bella realidad. Y eso, se lo debemos, más que a nadie, a nuestro patrocinador Endesa, que durante diez años ha sguido apostando por el cine italiano y su "open power". También le damos las gracias a Illy por apoyarnos siempre con la energía del café.
El día 23 de noviembre, las luces del Festival y del cine italiano se encienden en Madrid. Dentro de una semana, cuando se apaguen, empezará otra vez esa silenciosa, preciosa temporada durante la que se piensa, se descubre, se acoge –y se construye– el nuevo. No importa cuántas ediciones se hagan, siempre será un proyecto piloto.
Laura Pugno
Directora del IICM